Querido Presidente
Una vez más, hemos tenido conocimiento a través de los medios de comunicación de su inminente reunión con el Presidente del Gobierno. Este encuentro adquiere especial relieve si tenemos en cuenta los compromisos ya adquiridos con otras Comunidades Autónomas en materia de inversiones.
Es llamativo y, a la vez, muy negativo que no haya tenido a bien convocarnos a los representantes de las fuerzas políticas para acudir a esa reunión con el respaldo de todos, máxime si tenemos en cuenta que algunas cuestiones de las que va a abordar responden al desarrollo del nuevo Estatuto de Autonomía que ha tenido el respaldo de cerca del 100% del Congreso de los Diputados.
Ahora bien, como viene siendo habitual, ese es su particular concepto del consenso; desde el Referéndum han prescindido absolutamente de la opinión de los demás para la aplicación de la primera Norma de Andalucía. De hecho, ayer aprobaron un Proyecto de Ley de designación de senadores de la Comunidad Autónoma que desde el más mínimo espíritu democrático tenía que haber sido consecuencia de una Proposición de Ley acordada por todos los grupos parlamentarios. Le exigimos que acuda a esta reunión a reivindicar lo que nos corresponde y que no supedite los intereses de los andaluces a los de su partido político.
Estimamos que ante la cercanía de la aprobación por parte del Consejo de Ministros, del Proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado para el 2008, van abordar las inversiones que destinará el Estado a Andalucía. Andalucía es la Comunidad Autónoma con más población y, además, presenta una problemática socioeconómica que requiere el máximo esfuerzo inversor de la Administración central. Andalucía no sólo debe ser en los próximos Presupuestos Generales la Comunidad Autónoma que más inversiones reciba del Estado, sino que debe disponer de las mismas cláusulas que se han acordado con otras regiones para garantizar que las inversiones no ejecutadas en el ejercicio se transfieran a un fondo gestionado por la Comunidad.
Asimismo, no sería admisible que Andalucía no recibiera fondos adicionales en concepto de aplicar de forma retroactiva el criterio de población a las inversiones recibidas y Cataluña sí los obtuviera por el criterio del PIB. Es conveniente demandar que las inversiones se ejecuten. Baste un dato: en los dos últimos ejercicios presupuestarios cerrados, de las inversiones previstas para Andalucía, se han dejado de ejecutar 1.500 millones de euros. En los tiempos que corren, con tanta amenaza para la solidaridad, resultaría muy conveniente que alcance un compromiso para cumplir la promesa tantas veces reiterada de duplicar el Fondo de Compensación Interterritorial.
Por otro lado, esperamos y le exigimos que como Presidente de todos los andaluces se oponga a un criterio inconstitucional de reparto de los fondos públicos como es el reparto de las inversiones en función del PIB, un planteamiento que significa más inversiones para el más rico y que haría sonrojar a cualquier persona que apueste por la solidaridad. Asimismo, juzgamos imprescindible cuantificar cuanto antes la Deuda Histórica. Tras las elecciones de 2004, el Sr. Rodríguez Zapatero se comprometió a hacerlo en pocas semanas. Partimos de los más de 3.000 millones que el Presidente del Gobierno pactó con los nacionalistas catalanes para que dieran el sí al Estatuto de Autonomía de Cataluña. Otra cifra de primordial referencia son los 1.143 millones de euros acordados en el Parlamento de Andalucía.
Espero que no vuelva 12 años atrás. No es aceptable que no se cuantifique y que se establezca un mero anticipo a cuenta que saldará el Gobierno que voten los españoles en las próximas elecciones. Después de tantas promesas conviene recordarle que el anticipo a cuenta prometido por el Gobierno del Sr. González fue saldado por el Gobierno electo del Partido Popular en 1996. Otro aspecto clave a tratar se refiere a las infraestructuras.
Hay que conseguir que en los próximos Presupuestos se contemple un fondo que permita la liberalización total de los peajes de Andalucía. Sería insultante que se mantuviera solamente para liberar los peajes de una Comunidad Autónoma por la presión de los nacionalistas. Asimismo, el reciente visto bueno por parte del Ejecutivo Central al trasvase Ebro-Besaya, en Cantabria, hace una vez más imprescindible solicitar de forma contundente el trasvase contemplado en el Plan Hidrológico Nacional del Ebro hacía Almería cuya paralización por parte del Gobierno del Sr. Zapatero supone un perjuicio grave a los intereses de los sectores productivos andaluces. En relación con el agua, y tras el anuncio de la Ministra de Medio Ambiente de retirar la Ley que iba a dar cobertura a la nueva gestión de los ríos, sería conveniente que de una vez por todas se explique cómo y en qué fecha se va a cerrar el traspaso del Guadalquivir. Cuándo está prevista la Comisión Mixta Paritaria Gobierno-Junta de Andalucía, no vaya a ser que todo quede en compromisos políticos, en declaraciones de intenciones que se esfuman tras la celebración de las elecciones.
El reciente hundimiento del “Nuevo Pepita Aurora” y el encallamiento del “New Flame” han puesto en evidencia errores y falta de medios en los servicios marítimos que conviene tratar en la reunión que mantendrá con el Presidente del Gobierno en aras a conseguir un Plan de seguridad marítima y una Autoridad única en las aguas del Estrecho.
Es también básico hacer autocrítica y abordar el problema de la inmigración, sobre todo, en relación con la llegada de menores a nuestras costas y la reclamación de fondos necesarios para los ayuntamientos que les permita hacer frente a su atención.
Por último, debería plantear al Presidente del Gobierno de la Nación la devolución a la ciudad de Marbella de los bienes que se pueden incautar tras los procedimientos judiciales que han perseguido la corrupción en esa ciudad.
Estas son, en definitiva, las cuestiones que considero más urgentes abordar en defensa de los intereses de los andaluces. Esperamos que la reunión no se resuelva con meras declaraciones de intenciones, sino que los compromisos adquiridos se plasmen en los Presupuestos Generales del Estado ya que de otra forma no serían más que nuevos “brindis al sol” a los que nos tienen tan acostumbrados últimamente.
En espera de sus noticias, reciba un cordial saludo, Un abrazo
Javier Arenas Bocanegra
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