Varios días después del fatídico partido, Puertas muere en el Hospital de Sevilla en el que se encontraba hospitalizado.Una triple parada cardiorespiratoria de la que los médicos pudieron sacarlo adelante, le provoca daños cerebrales irreversibles por la falta de oxigenación consecuente a la parada.
Estos hechos nos demuestran que nadie está libre de peligros cuando de nuestro motor se trata.Nuestro corazón, el órgano más complejo del que dependemos segundo a segundo de forma autónoma es capaz de jugarnos malas pasadas, y ni siquiera en casos de deportistas de élites que requieren de forma rutinaria chequeos podemos descuidarnos.
Este suceso nos muestran la importancia de realizarnos chequeos rutinarios donde posiblemente pequeñas alteraciones pueden prevenir graves problemas si son descubiertos a tiempo.
Vean la lista de deportistas muertos de forma similar.
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