
Por andalucía libre
Narra Tito Livio en su libro de historia Aníbal contra Roma, la batalla de Cannas, el culmen de la estrategia militar. En ella, los restos del ejército púnico, no más de 35.000 hombres, se enfrentan a un imponente ejército romano de más de 80.000, pero este era, además, la crema del senado y del pueblo de Roma. Tras la trampa tendida por Aníbal quedaron los cuerpos de más de 50.000 romanos en el campo de batalla. En la celebración de la misma, algunos comandantes exaltados le exigían la toma de Roma. Aníbal, sabedor de sus posibilidades, se negó. Maharbal, quizás el más exigente de todos, le soltó una frase que ha quedado para la posteridad: “Aníbal, sabes vencer, pero no sabes aprovechar la victoria.”
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